Desde el siglo XI, como resultado de las Cruzadas,
los europeos reclamaban ciertos productos a los que se habían acostumbrado de
su contacto con Oriente. Entre ellos, las especias, utilizadas para condimentar
los alimentos, y también algunas plantas de uso medicinal. La ruta para llevar
esos productos a Europa era conocida como “La Ruta de las Especias”. Partía del Océano Índico, llegaba al
Golfo Pérsico y de ahí se trasladaba a Alejandría, Antioquía y Constantinopla
(hoy Estambul), ciudad que servía de enlace entre Oriente y Occidente y a
través de la cual se hacían importantes transacciones comerciales.
Por su interés en la cocina y en la salud, esta
entrada y la próxima las destinaremos a trazar nuestra particular Ruta de
las Especias: de la A a la Z, empezando por el Anís verde y terminando por el jengibre (Zingiber officinale).
Estimula las secreciones
(salivares, gástricas y de los bronquios) y
facilita la digestión. Es carminativa (favorece la expulsión de gases
del tubo digestivo) y espasmolítica (a nivel respiratorio y digestivo).
Sus
granos se preparan en infusión (2 ó 3 tazas al día), o molidos con una
ensalada. Consultar a un especialista en caso de embarazo e hipertensión.
AZAFRÁN: para aliviar el dolor de la regla.
Es
la especia más cara (para 1 Kg de azafrán se requieren pistilos de 200.000
flores). Es sedante, tónica, calma los dolores menstruales y es hipotensora.
Para
hacer una infusión: 6 estigmas / taza, añadir agua, té o leche caliente (sin
llegar a hervir) y dejar reposar bastante tiempo, ideal 4 horas.
CARDAMOMO:
fortificante.
Es una especie
“caliente”, adecuada para las personas estresadas y los fumadores. Se debe
masticar uno o dos granos al día para fortalecer el bazo y el estómago. Si es
posible, resulta aconsejable escoger su versión “bio”, ya que al ser una planta
subtropical soporta mal los tratamientos que se le dan en nuestro clima.
CLAVO
DE OLOR: contra el dolor de muelas.
Alivia temporalmente el dolor de una muela cariada.
Se puede masticar un clavo directamente como remedio de urgencias en dolor de
muelas. También se puede añadir 1 gota de aceite esencial puro en un algodón y
poner encima de la muela que duele.
Se
emplea en aceite para dar fricciones en las contracturas musculares (USO
EXTERNO). (Modo de preparación: introducir en una botella ámbar ½ litro
de aceite de oliva y 2 botes de clavos de olor ligeramente machacados, se pone
al sol o cerca de un radiador para que aumente la temperatura ligeramente y se
deja unos 20 días, removiendo de vez en cuando para favorecer la extracción del
eugenol).
CILANTRO:
buen calmante intestinal.
En
grano desprende un perfume ligeramente picante, muy diferente al de sus hojas.
Combate las flatulencias y calma los cólicos. Las hojas de cilantro son muy
sabrosas en la sopa de fideos.
COMINO:
beneficioso para el colon.
Muy empleado en la
cocina mediterránea, se utiliza también en las terapias ayurvédicas.
Es
carminativo. Si tienes gases y te suenan las tripas dos horas después de haber
comido, toma unos granos de comino y te sentirás mejor. Es preferible tomarlo
crudo. Puede añadirse a las legumbres y la verdura hervida para mejorar su digestibilidad.
CÚRCUMA: antinflamatoria.
De la misma familia
botánica que el jengibre. Su pulpa naranja es responsable del color del curry,
muy utilizado en la cocina hindú. Conocida por sus efectos antitumorales y
antioxidantes, es el antinflamatorio natural más potente que se conoce. Muy
utilizada fundamentalmente en afectaciones hepatobiliares.
En medicina ayurvédica
tiene amplio uso contra las hepatitis A y B. También se usa como
inmunomoduladora, y como coadyuvante en el tratamiento de ciertas formas de
cáncer como el carcinoma de mama y el hepatocarcinoma.
Los principales estudios
científicos que avalan las propiedades de la cúrcuma se deben al Dr. Aggarwal y
su equipo de investigadores en el hospital M.D. Anderson (Houston, Texas). Los
efectos contra el cáncer parecen derivar de su habilidad de inducir apoptosis
en células cancerígenas sin efectos citotóxicos en células sanas. La cúrcuma
puede interferir en la actividad del factor de transcripción NF-κB que está
involucrado en diferentes enfermedades inflamatorias y el cáncer.
Recomendación
de uso: Se debe combinar con pimienta para asimilarla mejor. Puedes mezclar ¼
de cucharada sopera de cúrcuma en polvo con ½ cucharada sopera de aceite de
oliva y una generosa pizca de pimienta negra (para aderezar verduras, sopas y
ensaladas).
Fuente de información sobre la cúrcuma: Anti Cáncer. Una nueva forma de vida. Dr.
David Servan-Schreiber.
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La Ruta de las Especias: de la A a la Z. (II)
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